jueves, 4 de febrero de 2016

ARQUETIPOS, EL LENGUAJE SIMBÓLICO DEL INCONSCIENTE.


Qué es un arquetipo? un patrón básico, una idea general que se cumple a cualquier nivel o dimensión.
¿Qué es el inconsciente? aquello que, siendo nuestro, no vemos. Si viésemos todo seríamos un ser despierto. Buda dijo cuando le preguntaron: ¿qué eres? ¿eres un dios, un profeta? No, dijo Buda, soy un ser “despierto”.
El inconsciente se comunica con el consciente en dos lenguajes:
Uno de los lenguajes, lo utiliza dentro de nuestro universo, de lo que creemos ser conscientemente, el cuerpo: las emociones.
Otro lo utiliza fuera del cuerpo, de lo que creemos ser, el simbolismo, los arquetípos.
El inconsciente simplifica el universo: aquello que tiene la misma función, aunque sea en nivel distinto es equivalente, es decir, tiene un arquetipo único.
Estos niveles son: mental, emociona, físico y espiritual.
Un arquetipo es algo que conecta los cuatro niveles en uno,
Las casualidades, coincidencias, líneas, patrónes de todas las manifestaciones de la realidad fuera del cuerpo y dentro de él coinciden, más allá de lo lineal, con lo fractal en un patrón arquetípico.
Por ejemplo, la nutrición física, emocional, mental o espiritual es lo mismo. Nos relacionamos con ella desde la misma perspectiva. Tenemos las mismas potencialidades y los mismos bloqueos a cualquier nivel. Ver los  niveles de forma separada crea la Matrix,a través de “programas” heredados que repiten patrones de dolor, de “separación”. Sentirnos separados del resto del universo nos hace sufrir porque nos vemos indefensos frente a algo muy grande y misterioso.
Otra idea básica de un arquetipo es que no es necesario aprenderse para que sea percibido por nuestro Inconsciente: es un idioma no se aprende, se intuye, conocido. Nadie necesita aprender a soñar.
Madre, padre, guerrero, maestro, comerciante-socio, mensajero-hermano-vecino…son arquetipos básicos conocidos y son reflejados en los patrones tanto astrológicos como oníricos, entendidos aunque no sean razonados.
Así, como ejemplo de un programa, si tenemos problemas digestivos, tenemos un problema con la madre arquetípica, es decir, con la forma en que nos nutrimos a cualquier nivel, sea éste físico, emocional, mental y espiritual. Trabajar un nivel y dejar el resto sin tocar no soluciona nada o poco, porque el patrón mayor reproducirá, con el tiempo, el pequeño.
No podemos curar un nivel sólo porque los distintos niveles se entrelazan, se completan, se influyen y se polarizan. Da igual la densificación energética, sea tierra o emoción, -femenina- o mental, energética -masculina-.Si tenemos un patrón lo expresamos dentro-fuera, como en cualquier nivel de densificación energética.
Cada programa tiene cuatro niveles que diferencian la realidad externa y dos que la diferencian entre dentro-fuera, mamá-papá, respectivamente.
Un patrón, un arquetipo, por definición se cumple a cualquier nivel o división. Si no, no sería tal.
Una forma de percibir el universo, un programa, se manifiesta en todas las facetas de nuestra vida.
El Ser despierto que eres te habla en ese idioma, cuando te habla en el “exterior” de tu cuerpo, utiliza el lenguaje simbólico. Es necesaria la luz para ver fuera, yan, aquello que creemos ser y lo hace en el idioma arquetípico-simbólico. Es el idioma de los sueños y de la astrología, el que el chamanismo entiende, la cábala utiliza y la BioTMR estudia.
Dentro, nuestro Ser despierto nos habla en emoción, no hay “luz”, yin, por ejemplo a través de la TMR, – frecuencias emocionales, no audibles-. Las emociones son sonidos no audibles, captados por mamíferos, aves y peces a través de los receptores AMPA.
Para despertar debemos “escuchar” más y parlotear racionalmente menos.Comunicarnos más con el Ser y menos con el Ego.
Las enfermedades nos sobrevienen cuando nos empeñamos en no disfrutar, no vivir y or lo tanto, no ser coherentes con lo que nos apetece hacer. Lo hacemos por creencias, no por lo emocional, sino por lo racional.
La emoción es el idioma que nos conecta interiormente con el universo exterior, que nos hace sentir lo que somos, un único universo, una única energía, una misma mente.
Sentir es resonar con cualquier ser que esté fuera de mí, es una empatía generalizada.
Sentir es lo mismo que crear, aprender, atender o disfrutar, porque no hay atención ni creatividad sin disfrute. Es lo que nos alimenta, gracias a lo cual vivimos. Es la misma vida y simboliza el agua, la abundancia (liquidez) y el amor.
Ahora, en ésta crisis ¿qué arquetipo estamos limitando de nosotros mismos para coartarnos la vida, el disfrute, la emoción, la abundancia?
http://biotmr.com/

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